Evaluación neuropsiquiátrica

¿Cómo podemos ayudarte?

Someterse a una evaluación neuropsiquiátrica puede parecer un proceso complicado y abrumador, pero no tiene por qué ser así. En Lavendla queremos hacerte el camino más fácil. Por eso, en este artículo te explicamos de forma clara y sencilla qué es una evaluación neuropsiquiátrica y cómo funciona, especialmente si sospechas que tú o alguien cercano pueda tener TDAH o autismo.

¿Qué es una evaluación neuropsiquiátrica?

Se trata de una evaluación exhaustiva que identifica tanto las dificultades como los puntos fuertes de una persona, ayudando a determinar qué tipo de apoyo y asistencia puede necesitar. Incluye entrevistas para analizar los síntomas neuropsiquiátricos (como los del TDAH o el autismo) desde la infancia hasta la edad adulta, evaluando su impacto en diferentes áreas de la vida: estudios, trabajo, relaciones personales, entre otras.

Durante este proceso participan un psicólogo y un psiquiatra, que trabajan conjuntamente en el diagnóstico. Este tipo de evaluación no solo aporta autoconocimiento, sino que también es un paso clave para mejorar tu bienestar psicológico. En Lavendla estamos aquí para ofrecerte el apoyo que necesitas.

Lo que realmente destacó de nuestra terapeuta fue su empatía genuina y su capacidad de comprensión. No solo tenía un profundo conocimiento sobre la neurodiversidad, sino que también compartía experiencias personales que conectaron con nosotros de inmediato, creando un vínculo de confianza desde el primer momento.

Benedetta Osarenk

Quizás lleves tiempo reflexionando sobre tus síntomas antes de decidirte a realizar una evaluación. Como adulto, puede que hayas notado que funcionas de forma distinta a los demás, enfrentando dificultades en el colegio, el trabajo o las relaciones personales. En el caso de los niños, suele ser el colegio o algún adulto cercano quien detecta señales de alerta.

Una evaluación neuropsiquiátrica puede ofrecerte varios beneficios:

• Comprensión: Ayuda a aclarar tu situación y a entender por qué enfrentas ciertos retos.
• Plan de tratamiento: Un diagnóstico permite a ti y a tu equipo médico diseñar un plan de tratamiento eficaz, abordando cuestiones como la atención, la planificación y la autoestima.
• Apoyo: Un diagnóstico puede abrirte las puertas a recursos y ayudas específicas, como adaptaciones en el entorno educativo o laboral.

Este tipo de evaluación también puede identificar si existe una combinación de diagnósticos, como TDAH y autismo, que suelen presentarse juntos. Mientras que el TDAH implica dificultades con la atención, hiperactividad e impulsividad, el autismo se asocia con desafíos sociales, rutinas rígidas y resistencia al cambio. El diagnóstico determinará el nivel de gravedad y las intervenciones adecuadas para tu caso.

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¿Cómo funciona una evaluación neuropsiquiátrica?

• Primer encuentro: Se realiza una evaluación inicial para analizar cómo tus síntomas afectan a diferentes aspectos de tu vida.
• Pruebas y entrevistas: Incluyen reuniones contigo y, en algunos casos, con familiares o profesores (si se trata de un niño).
• Seguimiento: Tras las pruebas, se comparten los resultados y se proponen recomendaciones de tratamiento.

¿Por qué Lavendla?

Paso a paso:

Paso 1: Primer contacto

Dar el primer paso puede resultar abrumador, pero realizar una evaluación es una forma de cuidar tu salud mental y encontrar claridad. En el ámbito privado, los tiempos de espera suelen ser mucho más cortos que en la sanidad pública. Si tienes dudas o necesitas orientación, en Lavendla estaremos encantados de ayudarte.

Paso 2: Evaluación inicial

Antes de la evaluación completa, un psicólogo licenciado realiza una entrevista para repasar tus antecedentes, síntomas y otros factores relevantes. También se rellenan cuestionarios y pruebas de autoevaluación.

Paso 3: Evaluación neuropsiquiátrica

Esta fase implica varias actividades:

• Entrevistas: Se explora cómo han influido los síntomas en diferentes etapas y áreas de tu vida. Si se evalúa a un niño, el colegio suele participar.
• Pruebas psicológicas: Evalúan funciones como la atención, la concentración y otras habilidades cognitivas.
• Visita médica: Incluye una revisión neurológica y análisis de sangre para descartar otros problemas de salud.

Paso 4: Evaluación y diagnóstico

Tras completar las entrevistas y pruebas, el psicólogo y el psiquiatra analizan los resultados y elaboran un diagnóstico. Se te entrega un informe detallado junto con recomendaciones personalizadas.

Paso 5: Tratamiento y apoyo

Si se confirma un diagnóstico, se discuten las opciones de tratamiento, que pueden incluir:

• Terapia cognitivo-conductual adaptada.
• Apoyo en el entorno educativo o laboral.
• Medicación, si se considera necesaria.